¿Cómo entender "Yo y el Padre uno somos"?

Desde tiempos antiguos muchos eruditos y comentaristas bíblicos han tratado de descifrar la identidad de Dios como «Padre» e «Hijo». Sin embargo, ¿sus conclusiones fueron ciertas?

Al mencionar al Padre y al Hijo, en nuestra mente occidental y moderna, como también llena de dogmas religiosos, nos imaginamos a dos personas o individuos, a Dios y su hijo, que, según nuestra mente, es inferior a su Padre.

«Yo y el Padre una sola cosa somos» Juan 10:30 (Traducción Textual del hebreo).

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Elohim como Padre

El término «Padre» (hebreo: Av) aparece multitud de veces en Las Escrituras, y en varias de ellas está directamente relacionado con Elohim.

«Un hijo honra al padre, y un siervo a su amo. Y si Yo soy Padre, ¿dónde está mi honor? Y si Yo soy Amo, ¿dónde está mi temor?»

Malaquías 1:6a (Traducción Textual del hebreo).

Algunos ejemplos del significado hebreo de «Av» los podemos encontrar en los siguientes pasajes:

• Génesis 45:8, José como máxima autoridad delegada.

«Ahora pues, no fuisteis vosotros los que me enviasteis aquí, sino Dios; y Él me ha puesto por padre de Faraón y señor de toda su casa y gobernador sobre toda la tierra de Egipto.»

• 2 Reyes 5:13, Naamán como amo y señor de siervos.

  «Pero sus siervos se le acercaron y le hablaron, diciendo: Padre mío, si el profeta te hubiera dicho que hicieras alguna gran cosa, ¿no la hubieras hecho? ¡Cuánto más cuando te dice: «Lávate, y quedarás limpio»!»

• 1 Samuel 24:11, David le dice a Saúl 'padre' como ungido (heb.: mashíaj) de YEHOVAH.

  «Y mira, padre mío, mira la orilla de tu manto en mi mano.»

• Génesis 4:20, Jabal es padre, es decir, el origen, la fuente de todo habitante de tienda y criador de ganado.

   «Y Ada dio a luz a Jabal, el cual fue padre de los que habitan en tiendas y tienen ganado.»

Por lo tanto, la Escritura concluye en que un padre no sólo es el que engendra un hijo, sino el más grande en poder y autoridad, como también, la fuente, el origen o el inicio de su casa, simiente o costumbre.

Entonces, cuando la Escritura menciona a Elohim como 'Padre', hace referencia a su máximo poder y autoridad, y a su trabajo como la fuente de donde todos venimos, el origen y Creador de todas las cosas.

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Elohim como Hijo

En cuanto al término hebreo «Ben», no solamente tiene el significado de 'hijo' como engendrado, sino también de 'heredero, discípulo o comisionado'.

Esta definición se aplica al Ben Ha'Elohim, Yeshúa Ha'Mashíaj, como «Elohim enviándose a sí mismo y portando una herencia».

Esta herencia es un testimonio, que Juan lo define como 'la vida perpetua', o en hebreo: <jaim 'olam>, la vida en el 'olam venidero, que es para siempre.

Este testimonio es dado a los coherederos, los cuales son llamados y escogidos por Él mediante su voluntad, a los que Él de antemano hizo partícipes. Esto quiere decir que todo al que Adonai le dé oídos para escuchar y reciba el testimonio del Ben, de Elohim enviándose a sí mismo, tiene la vida.

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Elohim como Padre e Hijo

Como ya mencionamos anteriormente, 'Padre' en hebreo es «Av» , e 'Hijo' en hebreo es «Ben», y con respecto a Elohim, no hace referencia a dos personas diferentes, sino a dos 'trabajos' de un solo Elohim para con el hombre.

Cuando digo: 'trabajos', estoy haciendo referencia a todo el plan de redención de Elohim, cada una de sus obras desde el principio hasta el final.

Entonces, cuando leemos 'el Padre', en hebreo «Ha'Av», la Escritura hace alusión a la obra de Elohim en su suprema creación y poder, la fuente de la cual todos venimos, y su enseñanza y dirección como líder y comandante de su Casa.

Y por otro lado, cuando se hace referencia al 'Hijo', en hebreo «Ben>, la Escritura nos está enseñando el trabajo de Elohim como mensajero y portador de su herencia, el cual se despojó de todo su gran poder (esto es, 'El Padre', «Av»), haciéndose en forma de siervo, en cuerpo, semejante al ser humano, pero no humano (esto es, 'El Hijo' «Ben»).

Podemos entonces concluir como empezamos: "Yo y el Av somos una sola cosa", ELOHIM y su gran amor para con su pueblo.

Añadiendo una última cosa, y para reflexionar...

Cuando los fariseos escucharon estas palabras de Yeshúa, le quisieron apedrear, por lo cual Yeshúa les dice: "Por cuál obra buena me apedrean", entonces ellos replican: "Por ninguna obra buena, sino POR BLASFEMIA, porque tú siendo hombre, TE HACES ELOHIM'.

Ellos lo entendieron... ¿se entenderá ahora?